SIGLO DE ORO ESPAÑOL


El Siglo de Oro español

El siglo XVII es el siglo de oro del teatro en España. Es un momento en el que las circunstancias sociales y políticas determinan una situación excepcional: la representación pública se convierte en el eje de la moral y la estética. Las "apariencias" son fundamentales.

La Literatura española del Barroco es un periodo de creación literaria que abarca aproximadamente desde las obras iniciales de Góngora y Lope de Vega, en la década de 1580, hasta bien entrado el siglo XVIII. El siglo más característico del barroco literario español es el XVII, en el que alcanzan su cénit prosistas como Baltasar Gracián y Francisco de Quevedo, dramaturgos como Lope de Vega, Tirso de Molina, Calderón de la Barca y Juan Ruiz de Alarcón o la producción poética de los citados Quevedo, Lope de Vega y Góngora.

Las características fundamentales de la literatura barroca española son la progresiva complejidad en los recursos formales y una temática centrada en la preocupación por el paso del tiempo y la pérdida de confianza en los ideales neoplatónicos del Renacimiento. Asimismo, es de destacar una variedad y diversidad en los asuntos tratados, la atención al detalle y el afán de atraer a un público amplio, de lo que es ejemplo el auge de la comedia nueva lopesca. De la preocupación sensual dominante en el siglo XVI se pasa a un énfasis en los valores morales y lo didáctico, donde confluyen dos corrientes: el neo estoicismo y el neo epicureísmo. El Criticón de Gracián supone un punto de llegada en la reflexión barroca sobre el hombre y el mundo, la conciencia del desengaño, un pesimismo vital (pero no exento de esperanza) y una crisis de valores general.

Los géneros se mezclan, convive en Góngora la poesía lírica de estilo sublime de la Fábula de Polifemo y Galatea que hace virtud de la dificultad, con romances y letrillas satírico burlescas, de amplia difusión popular y las dos corrientes se hibridan en la Fábula de Píramo y Tisbe; Quevedo cultiva los poemas metafísicos y morales más trascendentes, al tiempo que escribe sobre asuntos de carácter bajo y hasta chocarrero (Gracias y desgracias del ojo del culo).

El teatro barroco español configura una escena popular y que ha perdurado como producción clásica para el teatro futuro. Los dramas filosóficos de Calderón de la Barca, de los que es ejemplo sobresaliente La vida es sueño, suponen un cénit en la producción dramática española y, como toda la literatura barroca, se inscribe en una época de esplendor que recibe el nombre genérico de Siglo de Oro.


Se conoce como Siglo de Oro (parte del siglo XVI y XVII) a la época literaria en la cual las letras alcanzaron en España su mayor esplendor. Nunca se escribieron en España tantas y tan bellas obras literarias como en el Siglo de Oro, llegando la lengua castellana a la cumbre de su perfección. Puede dividirse en tres periodos el Siglo de Oro (también llamado Edad de Oro): el inicial, que abarca hasta el final del reinado de Carlos V, el del apogeo (época de Cervantes), que se extiende en los reinados de Felipe II y Felipe III y el de decadencia, bajo el reinado de Felipe IV.

Características más importantes de esta época:

Religiosidad: el catolicismo inspira las obras literarias y toda manifestación de cultura en España.

Espíritu patriótico: el florecimiento de las letras tuvo un sello puramente hispano, los personajes y ambientes fueron patrios.

Monarquismo: los escritores homenajearon al soberano.



La Literatura Española es una etapa histórica situada aproximadamente en la década de 1580 hasta el siglo XVIII. El cambio de las ideologías y los pensamientos de la gente provocó que los escritores utilizasen la filosofía estoica de Séneca, pero a su vez contaban con el sentido religioso de la vida. Ideas que se expresan en la literatura Barroca en España.

· La vida es corta, el tiempo lo va destruyendo todo y vivir es como morir poco a poco.

· El mundo no tiene valor, todo es un caos lleno de dolor y peligro.

· La vida es un sueño, se vive engañado ya que no se ve la realidad.

Los escritores aportaban a sus obras el desengaño, pesimismo y la falsedad y la engañosa que es la belleza de la Naturaleza. En la época secular del siglo XVI el estado de la política y la sociedad en España hizo que los escritores se adentraran en este movimiento usando como temas el hambre, la peste, la desigualdad social, los mendigos, la miseria, etc. Estos temas fueron llevados a la literatura ya que su base era la decepción y lo negativo. Se daba atención a los detalles, su objetivo era atraer a un público muy selecto (gente de clase alta con dinero y un nivel de vida mayor al resto de la población que era capaz de concederse sus estudios). Un ejemplo, para atraer al público es la comedia lopesca.


Don Quijote de la Mancha es una novela escrita por el español Miguel de Cervantes Saavedra. Publicada su primera parte con el título de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha a comienzos de 1605, es una de las obras más destacadas de la literatura española y la literatur universal, y una de las más traducidas. En 1615 aparecería la segunda parte del Quijote de Cervantes con el título de El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha.
Don Quijote fue la primera obra genuinamente desmitificadora de la tradición caballeresca y cortés, por el tratamiento burlesco que da a la misma. Representa la primera obra literaria que se puede clasificar como novela moderna y también la primera novela polifónica, y como tal, ejerció un influjo abrumador en toda la narrativa europea posterior. En el año 2002 y a petición del Norwegian Book Club se realizó una lista con las mejores obras literarias de todos los tiempos. Ésta sería realizada con las votaciones de 100 grandes escritores de 54 nacionalidades distintas, apareciendo las obras en estricto orden alfabético, para que no prevaleciese ninguna obra sobre otra, pero por unanimidad se hizo una excepción con "Don Quixote" que encabezó la lista siendo citada como "el mejor trabajo literario jamás escrito".
Los invitamos a escuchar la primera parte del audiolibro español de Miguel de Cervantes "El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha"




A fines del siglo XV continúa sintiéndose en España la influencia de la pintura flamenca, que va de la mano muy de cerca con la italiana. A medida que transcurre el siglo XVI se acentúa la influencia italiana en los españoles. Así la figura más destacada de este período es Bartolomé Bermejo, un pintor de Córdoba que trabajo en distintos puntos de España e Italia.

Su obras más conocidas son la tabla de Santo Domingo de Silos, hoy en el Museo del Prado, que pintó para el altar mayor de la parroquia de Daroca; la Piedad, de la Capilla de los Arcedianos, de Barcelona; la tabla de San Miguel de Tous en Valencia y la Virgen de Montferrato en Acqui, Italia. También es de su repertorio el retrato Isabel la Católica, que se guarda en el Palacio Real de Madrid. Todas sus obras están pintadas al óleo, técnica procedente de Flandes, que dominaba ya en 1474 y que los españoles extendieron por Italia a fines del siglo XV.




La anunciación, Bermejo 1568





En sus últimas obras se acentúa la inexorable influencia italiana. No se sabe dónde se instruyó, lo que sí es seguro es que no fue ni en Aragón, ni en Cataluña, ni en Italia porque en ella sencillamente no se conocía el óleo. El portugués Nunno Gonsálvez y los españoles Rodrigo de Osona y Fernando Gallegos, de los que ya se ha hablado, usaron ese procedimiento y tal vez del primero pudo haber aprendido algo Bermejo.